Kong Nyong y el buitre
La imagen de la polémica, la imagen que hizo discutir al mundo sobre si Kevin Carter era un desalmado, la discusión que hizo darse cuenta al mundo de que era un desalmado.
Hasta esta fotografía la crisis de refugiados de Sudán, provocada por un golpe de estado, pasara desapercibida en los medios occidentales y las ayudas era minúsculas, Kevin Carter vio al famélico niño mientras un buitre lo acechaba, incluso esperó a que el buitre abriera las alas para que la imagen y el asedio resultase más espectacular, pero no sucedio.
La imagen definitiva crucificó a Carter, con ella ganó el Pulitzer, y todos los medios se cebaron sobre la actitud de Carter, sobre su motivación, dejó al niño desprotegido a merced del buitre por una fotografía mejor o por llegar a una sociedad anestesiada con el consumismo, el fútbol y la silicona.
Lo cierto es que el buitre no esperaba la muerte del niño, sinó sus heces, por ese motivo se había alejado de la tribu. Como se puede ver en su mano derecha lleva una pulsera de plástico de la estación de comida de la ONU. Otros fotógrafos que estaban en el campo de refugiados tomaron la misma fotografía, pero la publicada fue la de Carter.
Su mente perturbada por sus adiciones no resistió la presión y un año después de realizar esta fotografía tapó el tubo de escape do su coche, lo pizó a fondo y dejó esta nota en el asiento del copiloto:
«Estoy deprimido […] sin teléfono […] dinero para el alquiler […] dinero para la manutención de los hijos […] dinero para las deudas […] ¡¡¡dinero!!! […] Estoy atormentado por los recuerdos vívidos de los asesinatos y los cadáveres y la ira y el dolor […] del morir del hambre o los niños heridos, de los locos del gatillo fácil, a menudo de la policía, de los asesinos verdugos […] He ido a unirme con Ken, si tengo suerte.»
La Niña del Napalm
Hay fotografías que cambiaron la historia, esta es una de ellas. Thi Kim Phuc tenía sólo 9 años cuando un avión del ejército survietnamita bombardeó su pequeño pueblo en Trang Bang, cerca de Ho Chi Minh ( el entonces Saigón ), en un ataque coordinado con el mando estadounidense para intentar controlar las carreteras de abastecimiento entre Camboya y Vietnam.
Según los americanos, sus informes indicaban que no había civiles en la zona; pero sí los había y el napalm arrasó con todo, incluido el 65 % de la piel de la frágil y desvalida Phuc, totalmente desnuda porqué su ropa se calcinara y gritando «Muy caliente!, Muy caliente!» con un rostro aterrorizado y lleno de lágrimas.
Sucedió el 8 de Junio de 1972 cuando el fotógrafo Nic Ut realizó esta toma y retrató de modo crudo el horror de la guerra, la imagen resultó tan realista y nos acercaba tanto a la cruel realidad del conflicto que fue fundamental para su cese.
El Black Power y el Tercer Hombre
Juegos Olímpicos de México 1968, Tommie Smith gana la final de los 200 metros lisos y bate el record del mundo con 19,83 segundos en una época de profunda lucha por los derechos civiles en EEUU; Luther King había sido asesinado medio año antes en Memphis a manos de un segregacionista blanco, y con él había muerto el mayor defensor de la lucha pacífica, los Panteras Negras se debatían entre esta y la violencia.
Smith y el tercer clasificado, John Carlos, instantes antes de la ceremonia de medallas deciden organizar una protesta simbólica y pacífica a favor de los derechos civiles y la igualdad racial, pero no tenían nada preparado, salvo que la mujer de Smith, optimista y previsora, había comprado un par de guantes negos. El tiempo apremiaba y no sabían como reaccionaría el tercer hombre del podium, un blanco australiano, país donde los aborígenes habían sido masacrados y apartados, de modo que directamente y sin muchas esperanzas se lo preguntaron. Norman no sólo estivo de acuerdo sino que fue más allá, se puso la pegatina de OPHR ( Proyecto Olímpico para los Derechos Humanos ) encima del escudo del Comite Olímpico Australiano y les sugirió que cada uno de ellos utilizara uno de los guantes, por esa razón Smith levanta el puño derecho y Carlos el izquierdo.
Muchos fotógrafos en el estadio olímpico capturaron ese instante, y todo los medios del mundo occidental se olvidaron del deporte y abrieron al día siguiente con esa imagen, una imaxe donde el tercer hombre parece un mero figurante que simplemente ayuda a crear un contraste compositivo, pero Norman fue mucho más que eso, y es que las buenas historias tienen muchas capas de lectura.
Los tres fueron expulsados inmediatamente de la villa olímpica y tuvieron que abandonar México D.F. y regresar a sus patrias donde sufrirían las consecuencias de un acto de valentía y protesta. Pero el que más acusó los golpes fue el Tercer Hombre: Australia se olvidó de llamar a Norman para los Juegos Olímpicos de Munich 1972 a pesar de tener la marca mínima, y en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000 fue el único medallista histórico australiano no homenageado. Norman entró en una espiral de autodestrucción pero siempre afirmó: «Lo volvería a repetir», acabó su vida entre la depresión y botellas de alcohol.
El 3 de octubre de 2006 Peter Norman falleció en Melbourne y hasta Australia fueron sus dos compañeros de armas para portar su ataud.
En 2012 el estado australiano pidió perdón a la familia y homenageó a Peter Norman postumamente.
La carrera por la igualdad de Kathrine Switzer
«Ninguna mujer puede correr una maratón» sólo bastó esa frase de Arnie Briggs, su propio entrenador, para que Kathrine Switzer intentara correr la Maratón de Bostón de 1967, y con eso tirara abajo fronteras sociales y prejuizos sexistas.
Arnie era en realidad el cartero de la universidad, pero con 15 maratones de Boston a sus espaldas tenía suficiente experiencia para ser considerado entrenador. Salían todas las noches a correr unas 10 millas y Arnie siempre contaba sus batallas sobre la maratón hasta que una noche, según cuenta la propia Kathrine en «Marathon Woman» le replicó:
-Dejemos de hablar de la maratón de Boston y corrámosla!
-Ninguna mujer puede correr la maratón de Boston, replicó Arnie
Arnie explotó cuando le dije que Roberta Gibb la completara el año anterior, pero ningún registro lo acreditaba, Roberta la había corrido sin dorsal.
-Si corres esa distancia en un entrenamiento, yo seré el primero en acompañarte a Boston.
Sonrreí y me dije a mi misma: Lo he conseguido, tengo un entrenador, un compañero de entrenamiento y una meta: la carrera máis importante del mundo.
Kathrine estaba habituada a correr distancias medias, pero esto eran 42 kilómetros y sólo 3 semanas de preparación con el apoyo de Arnie y su novio Tom Miller. Los 3 eran conscientes de que la carrera de obstáculos ya había comenzado desde el momento en que habían decidido tomar parte, de modo que empezaron por leer el libro de normas de la competición y Bingo! no decía nada sobre las mujeres; cuando lo redactaron a nadie se le había ocurrido tamaña locura; aun así decidieron inscribirse como K.V. Switzer.La imagen más reproducida de la historia
El 5 de Marzo de 1960 Ernesto Guevarra ( El Che Guevara ), siendo Presidente del Banco Central de Cuba, se asoma al balcón y observa la gente en la Plaza de la Revolución para asistir al entierro de las 101 víctimas del atentado terrorista al barco La Coubre en la Habana; en ese preciso instante Alberto Díaz Gutiérrez ( Alberto Korda ) que trabajaba para el diario Revolución disparó su cámara y captoró la siguiente instantánea:
Leer másEl Beso del Hotel de Ville
Es una putada que estalle una burbuja de mágica perfección natural, pero lo que hasta 1992 fue una idílica y espontánea fotografía de Robert Disneau con su Rolleiflex mientras se encontraba sentado tomando un café frente al Hotel de Ville en París en el 50; y que posteriormente se convirtió en la imagen más vendida de la historia superando las 450.000 copias, resultó ser un montaje con dos actores :(
Todo saltó a la luz cuando en 1992 dos impostores aseguraron ser los protagonistas de la fotografía, entonces Disneau reveló la historia original y confesó que se trataba de una toma preparada, para la cual contratara a dos actores y como forma de pago les entregó una copia.
Françoise Bornet ( la mujer del beso ) aceptó esta rácana forma de pago, esperó 55 anos y en 2005 la sacó a subasta consiguiendo 200.000 dolares.
El Beso de Times Square
El día que finalizó la Segunda Guerra Mundial, los ciudadanos de Nueva York tomaron la plaza de Times Square en Manhattan. En ese clima de algarabía y frenesí un apuesto o aprovechado joven marinero se dedicaba a besar a todas las mujeres que encontraba en su camino, mujeres jóvenes y viejas por igual, el hombre estaba desatado cual borracho en una barra libre. El fotógrafo germano-americano Alfred Eisenstaedt, que cubría el evento para la revista LIFE, presenciaba estas y otras espontáneas muestras de embriagante afecto entre unos jóvenes liberados de un futuro tenebroso y siniestro cuando el extravagante Don Juan se hizo con los labios de una enfermera y Eisenstaedt capturó ese preciso instante, enfatizado por el contraste entre el negro y el blanco de sus uniformes, lo cual realzaba la fuerza de la imagen y representaba la liberación de una generación.
Paradójicamente un beso entre dos desconocidos se convirtió en uno de los más conocidos de la humanidad.
Uno de los primeros Photoshop de la Historia: Bandera de la URSS sobre el Reichstag
Manipulaciones Fotográficas Históricas
En muchas ocasiones la fotografía se utilizó para justificar acciones políticas, rememorarlas y reescribir la historia, como siempre: con la versión de los vencedores.
Dos de los ejemplos más icónicos son: la toma del Reichstag por los soldados soviéticos y el izado de la bandera americana sobre el monte Suribachi en Iwo jima.
Uno de los primeros Photoshop de la Historia: Bandera de la URSS sobre el Reichstag
Varios días después de la caída de Berlín en la Segunda Guerra Mundial, el fotógrafo Yevgueni Chaldej, que trabajaba para la Agencia de Prensa Soviética TASS, mandó confeccionar una gran bandera con la oz y el martillo y a continuación subir a dos soldados soviéticos a lo más alto de las ruinas del Reichstag ( el parlamento alemán ) con el fin de crear una imagen icónica de la victoria de los soviéticos sobre los alemanes y de paso dejar claro quien había sido el primero en llegar, liberar Berlín y acabar con los Nazis.El hecho de subir tan arriba para realizar la fotografía, hizo necesario que un segundo soldado sujetara al portador de la bandera. Y es aquí donde Chaldej tuvo que poner en funcionamiento sus dotes de manipulador, pues en la fotografía original se puede observar como el soldado de apoyo porta dos relojes; resulta más probable que el hombre los robase como parte del botín de los vencedores que que estuviese interesado en la hora de Berlín y Siberia al mismo tiempo. Este sutil matiz de la imagen tenía poco carácter heróico y Chaldej decidió borrar uno de los relojes y ya de paso añadir un poco de humo para darle más dramatismo a la imagen, pues los combates ya cesaran.
La maniobra propagandística estaba más orientada a arengar a los propios rusos ya que la Madre Patria fue la nación con más bajas de la guerra, con unos escalofriantes 20 millones de muertos. Los supervivientes podían aferrarse a una imagen para darle sentido a tanto dolor y a tantas muertes.
Banderas de nuestros Padres.
Joe Rosenthal ganó el Premio Pulitzer con la imagen de los seis Marines izando la bandeia de EEUU en la cumbre del monte Suribachi en Iwo Jima y esta se convirtió en uno de los símbolos más patrios de la cultura americana, reflejando la unión y el esfuerzo hacia un mismo objetivo.
Iwo Jima era un pequeño desierto de azufre en el medio del pacífico que no poseía ningún recurso, sin embargo era un punto estratégico para continuar con la conquista sobre el resto de islas del Imperio Nipón, ya que tenía un aeródromo; por este motivo se convirtió en una de las batallas más cruentas del pacífico, en la cual murieron 24.500 americanos y 21.000 japoneses ( todos los que había, sólo se capturaron 216 prisioneros que en realidad eran trabajadores coreanos ).
La fotografía de Rosenthal representaba el triunfo de los americanos y la fe incorruptible en la victoria final a través de la unión; todo sería ideal si en realidad no se tratara de una interpretación:
Rosenthal hizo posar a los soldados levantando la bandera cuando los combates ya finalizaran.
Robert Capa, el Miliciano Español y las 11 fotografías ligeramente desenfocadas.
Robert Capa, Endre Ernő Friedmann en realidad ( Budapest 22 de Octubre de 1913 ) era un judío húngaro que decidiu huir del fascismo incipiente a principios de la décado de los 30 en Europa del Este y refugiarse en París, allí conoció a Gerda Taro, Gerta Pohorylle en realidad, y juntos crearon al personaje «Robert Capa» alentados por las pocas esperanzas de vender fotografías siendo una mujer o un judío.
Gerda falleció en Madrid en 1937, avanzada la Guerra Civil Española, ella estaba tomando una fotografía y no percibió un tanque que daba marcha atrás en la vorágine del repliege de las tropas republicanas en Madrid por la llegada del ejercito franquista, a partir de ese momento el pseudónimo Robert Capa se asocia sólo a Endre.
En España fue donde tomó una de sus fotografías más controvertidas, reconocidas y universales: «Muerte de un miliciano» tomada el 5 de setiembre de 1936 en Espejo ( Córdoba ). Durante años se ha cuestionado la veracidad de la imagen por varios motivos; a día de hoy parece bastante probable que la imagen sea real pues los registros atestiguan que el miliciano fotografiado, Federico Borrell «Taíno», falleció ese día en dicha localidad; pero también se cuestiona si la fotografía es de Endre o de Gerda. En cualquier caso Capa contó que se encontraba en una trinchera presenciando el asalto de los milicianos a una ametralladora franquista, y en el cuarto de estos asaltos alzó su brazo y disparó al azar su Rolleiflex ( no la habitual Leica I ) y captó por fortuna para él y muy mala para el miliciano «Taíno» el instante exacto de su muerte, la imagen se convirtió en el símbolo más reconocido de la Guerra Civil Española y de la Guerra en su sentido más amplio y dramático.